MERCEDES FERNÁNDEZ/ El sueño es una de las cosas más importantes para la salud. Tener una buena calidad de sueño tiene muchos beneficios para la salud, sobre todo, mental.

Las personas que duermen poco durante la semana pueden desarrollar lo que se denomina síndrome disfórico que se caracteriza por la impulsividad, cansancio e irritabilidad de quienes lo padecen. Dicho síndrome no se soluciona con dormir horas de más.

Lo recomendable para un adulto, es dormir una media ocho horas diarias. Sin embargo, esto no es así y suelen reducirse a una media de cinco o seis horas al día con la idea, muchas veces, de recuperar en los días libres, las horas de sueño «perdidas».

Lo cierto es que, según los expertos, el sueño no se recupera. Es un error pensar en dormir horas de más en los días libres porque eso sólo hace que nos sintamos peor. De hecho, -aseguran- que los tiempos de reacción y la capacidad de concentración no funcionan como pensamos «por culpa de haber pasado más horas de la cuenta durmiendo».

Una buena solución sería acostarse cuando se tenga sueño y no «dejarlo para el fin de semana o los días libres». Una hora extra de sueño por la noche, es suficiente para tener una sensación de descanso.

La doctora Odile Romero, de la Junta Directiva de la Sociedad Española del Sueño, asegura al portal InfoSalus que «No se trata de recuperar el sueño, sino de recuperar el bienestar diurno y de la vigilia» y el ser humano necesita un 30% de su tiempo para dormir.

No obstante y pese a que son muchos los estudios y avances respecto al sueño, aún siguen investigando los científicos el secreto de por qué es necesario ese tiempo para recuperar el desgaste de la vigilia y lo que ocurre en nuestro organismo.

Imagen: Freepik.