M.F/ El mar Muerto, que es realmente un lago, es característico por su alto contenido en sal que presenta una concentración de grado 4. Esto significa que los cuerpos pueden flotar. Y que, por tanto, no hay seres vivos. No hay peces, ni plantas. Por eso, se llama mar Muerto.
La cantidad de agua que se evapora de él es mayor de la que recibe, por lo que esta masa de agua posee la mayor concentración de sal del mundo, unos 340 gramos por litro de agua.
El mar Muerto está ubicado en el valle Jordán -al oriente de Israel y Cisjordania-. Este río es también su principal afluente. Se encuentra a más de 400 metros por debajo del nivel del mar. Lo que le convierte en el punto más bajo de la superficie terrestre.
El mar Muerto es uno de los destinos que más atrae a los turistas. Además de que sus aguas poseen estas características tan peculiares, también contiene propiedades curativas favorables para brindar una buena salud. De ahí, que los visitantes lo conozcan como el “balneario terapéutico”.
Sin embargo, hay que tomar precauciones cuando la persona se bañe en él ya que no se debe sumergir la cabeza en sus aguas, saltar o bucear. Sólo se recomienda entrar lentamente y tumbarse de espalda.
De igual modo que tampoco está permitido beber su agua. Aunque sí otros líquidos, en el caso de que prolonguemos el tiempo de baño y hasta que nos duchemos; ya que la sal que se queda impregnada en la piel, puede deshidratarnos.
El mar Muerto también contiene depósitos de lodo negro fácil de extender por el cuerpo y que proporciona a la piel minerales nutritivos. Además, el bromuro del aire es también beneficioso para el cuerpo.
Gracias a todos estos elementos naturales que el mar Muerto aporta, han podido realizarse investigaciones y tratarse a personas enfermas.
Otro dato interesante es que allí, se encuentran grandes deposiciones de asfalto. Las grandes civilizaciones aprovecharon este recurso natural para construir figuras y esculturas. Como por ejemplo los egipcios, que lo emplearon en el proceso de momificación.