MERCEDES FERNÁNDEZ/ Se llama Otonomaki que significa «embalar a un ser humano» y es una nueva técnica para combatir el estrés en las personas. El método es muy antiguo. Sin embargo, su experimentación con adultos es más reciente.

La técnica procede de Japón y es bien sencilla. Consiste en que la persona se coloque tumbada en una colchoneta bocarriba, en posición fetal y se envuelve completamente -hasta la cabeza-. Para que sea efectiva, el paciente deberá permanecer unos 20 minutos en esa postura y en silencio. Otonomaki, normalmente, lo realizan personas con estrés, ansiedad o inseguridades. Pero además, es efectivo contra la rigidez corporal.

Se puede aplicar tanto en adultos como en niños. A estos últimos, se les deja libre la cabeza para que no se sientan agobiados.  Referente a los más pequeños, decir que fueron los primeros con los que se trabajó esta técnica.

La idea partió de la matrona, Nobuko Watanabe, que se inspiró en ohinamaki, una antigua costumbre japonesa de empaquetar a los bebés en una sabana apretada.  La matrona comenzó a probar este método con mujeres justo después del parto para aliviar sus dolores musculares. Su efectividad tuvo tanto éxito que lo extendió a todo tipo de personas como remedio contra el estrés.

No sólo lo dicen los expertos, sino que los propios protagonistas han asegurado sentir un profundo bienestar tras ser envueltos.