MERCEDES FERNÁNDEZ/ El perineo es la zona de los genitales externos y el ano. Es un conjunto de partes blandas (músculos y ligamentos) que cierran y tapizan la parte inferior de la pelvis.
Periné, perineo o suelo pélvico son sinónimos así que puedes usar cualquiera de estos términos para referirte a esta parte del cuerpo.
Realizar el masaje perineal tiene muchos beneficios para la salud física y mental. Suele realizarse a partir de la semana 34 de gestación, si no hay pronóstico que indique lo contrario. Puedes hacerlo tú misma, con tu pareja, con un fisioterapeuta o con quien tú decidas. Es una práctica muy recomendada para evitar desgarros y episiotomías durante el parto. Por lo que, además, favorece la buena recuperación después del mismo. Presta atención a las pautas que debes de seguir ya que conseguirás muchos beneficios.
Procedimiento
El masaje perineal es muy sencillo. No te va a llevar mucho tiempo porque la duración recomendada es entre 5 y 10 minutos. Eso va a ir en función de la reacción de tu cuerpo.
En realidad, el tiempo que estés haciéndolo tampoco es tan relevante. Lo importante es hacerlo bien y ya verás como, poco a poco, vas notando tu musculatura más elástica. Aunque la zona esté dilatada, la musculatura necesita estirarse mucho más para que el bebé salga. El masaje lo que hace es preparar esa zona para cuando llegue el momento de parir. En las fase de expulsión, los tejidos están sometidos a una fuerte presión porque el bebé está intentando asomar la cabeza. Es uno de los momentos más críticos del parto. Así que si todo sale bien, es muy probable que, gracias al tiempo que empleaste en hacer el masaje perineal, puede que ni te den puntos o te den muy pocos.
Lo primero es lavarte muy bien las manos para trabajar con una buena higiene. Es una zona susceptible a coger infecciones y más en el embarazo.
Ponte en la postura que más cómoda te resulte. Lo importante es estar tranquila.
Mantén el estiramiento sin llegar al dolor. Es cierto que, al principio, molesta un poco porque los tejidos están más rígidos pero si sientes la más mínima molestia, dolor, incomodidad o quemazón, PARA. Si tuviste un desgarro en un parto anterior, insiste en esa zona para que no vuelva a suceder.
Si crees necesario descansar uno o varios días, lo haces y después retomas. Realmente, no se puede precisar el tiempo que debes estar haciéndolo o cuánto debes descansar. El masaje perineal es una práctica muy personal y lo principal es que vayas notando mejoría y más elasticidad a medida que te lo vas haciendo. Así que cuando vuelvas a sentir malestar, vuelve a parar.
En el siguiente vídeo, te dan algunas indicaciones y te muestran cómo se hace.
¿Qué pasa si el parto acaba en cesárea?
No importa que tu parto haya acabado en cesárea puesto que el masaje perineal es beneficioso para prevenir también incontinencias propias de la edad y para fortalecer el suelo pélvico que sufre también durante el embarazo.
Sea como sea, realizarte el masaje perineal es beneficioso, siempre y cuando no haya nada que lo impida. De hecho, es una práctica que se puede hacer en cualquier momento de tu vida ya que son órganos que se van «deteriorando» con la edad y, por tanto, ayuda mucho a tu salud.
No sientas pudor por realizar esta práctica. Piensa que es por tu salud el día del parto porque facilita la dilatación, contribuye a la serenidad en el parto y te ayuda a familiarizarte con él. Piensa también en tu recuperación. El masaje perineal te va a ayudar a que sea más rápida.